No hizo alarde por desmarcarse del ámbito en el cual vivió. Las convenciones culturales, políticas y el status quo en su contemporaneidad no le generaban hastío. Paula solo quería en sus tiempos libres pintar como tantos lo hacían en su época. Los impedimentos que sufrió para poder plasmar ello hizo emerger una astilla que abrió una herida en su espíritu. Paula Becker se transformaría en un artista que dejaría a fuego su impronta,  aunque antes debió pasar por un tsunami de prejuicio, desdén y los dogmas de toda su sociedad. 

A principios del siglo XX y con 24 años Paula se establece en la comunidad artística Worpswede. Allí establece amistad con la artista Clara Westhoff y el poeta Rainer Maria Rilke. En ese ámbito comenzó a mostrar parte de su impronta y los primeros recelos de sus superiores. En medio de ello se casó con el pintor Otto Modersohn. Tras cinco años de matrimonio su vida de hunde y el presa de una fuerte angustia que la lleva a mudarse a Paris. En la ciudad luz lograra dar rienda suelta a su arte, no antes de pasar no pocos sobresaltos. 

 La cinta de Christian Schwochow recorre con una pátina admirable en cada cuadro el contexto de una vida de clase media Alemana. Cada escena esta retratada con encuadres soberbios. El vestuario le da aún más realce a las que lograda puesta en escena. La dramaturgia tiene un hilado clásico sin demasiados sobresaltos. El mismo es sólido y logra dar paso a todo el entramado de complejidades sociales, políticas y culturales de la época. Todo ello esta conjugado con maestría en la cocción que el film tiene en el enlace entre dirección, vestuario y montaje.

Lo que merece subrayarse del film es que el marcado machismo de la época le daba a Paula en muy marcado segundo lugar. Este ítem está muy bien balanceado en el film. Su marginación no obstante no es usada como victimización por parte de parte de ella y en la cinta este punto fue muy bien balanceado. Esto es algo medular en la estructura narrativa del film. La artista nunca busco ser una heroína o abandonar sus obligaciones como madre y ente familiar en la sociedad de su tiempo.

Su viaje a Paris le dará rienda suelta a un espíritu que clamaba por volcar su pasión en cada clase de pintura. Desde el vamos ya marco la atención de sus guías. En sus tiempos libres mayormente pintaba y allí, en medio de los estrecheces económicos y su ser indomable dio rienda suelta a lo que corria por sus venas y que no era otra cosa que plasmar su vida en la pintura. En medio de ello estarán acecho romance, noches de jaranas y su alma que no habrá rienda que logre controlarla. Entre ellos su esposo Otto que desde Alemania la extraña y sufre no solo el hastío que significa no tenerla, sino además el acoso de toda una sociedad que le espeta en la cara el descaro e ínfulas de una esposa ensimismada. 

El film entretiene en todo su recorrido. Lo hace con una buena costura en su designo. Lo solidifica en las convincentes actuaciones de todo su reparto. Carla Juri (Paula Becker), logra una formidable paleta de colores que son las dimensiones de su personalidad. Su atribulado ser no obstante no perdió nunca su eje y es la patina admirable de su personalidad: no busco golpearse el pecho con su arte, simplemente quiso consumarla. 

By Hugo Manu Correa

             PAULA

Título original

Paula

Año

2016

Duración

123 min.

País

 Alemania

Director

Christian Schwochow

Guion

Stefan Kolditz, Stephan Suschke

Música

Jean Rondeau

Fotografía

Frank Lamm

Reparto

Carla Juri, Albrecht Schuch, Roxane Duran, Joel Basman, Stanley Weber,Michael Abendroth, Bella Bading, Laura Bartels, Guido Beilmann,Vera Lara Beilmann, Peter Brachschoss, Klara Deutschmann, Enrico Di Giovanni

Productora

ARTE / Alcatraz Film / Degeto Film / Grown Up Films / Pandora Filmproduktion / Radio Bremen (RB) / Westdeutscher Rundfunk (WDR)

Género

Drama | Años 1900 (circa). Pintura. Biográfico

Sinopsis

Alemania, principios del siglo XX. La joven artista Paula Becker está decidida a seguir sus propias normas. A sus 24 años rechaza las convenciones establecidas y explora su estilo único, mientras florece en la comunidad artística de Worpswede, donde entabla amistad con la artista Clara Westhoff y el poeta Rainer Maria Rilke. Al casarse con el también pintor Otto Modersohn, cree haber encontrado a su alma gemela creativa, pero cinco años destinados a la vida doméstica hunden el espíritu de Paula, así que decide viajar sola al bohemio París, donde se embarca en un largo y esperado periodo donde su imaginación culmina e intenta autorrealizarse.