Estado de Ira
- Escrito por Sabrina Gilardenghi
- Publicado en Teatro / Críticas
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El escenario: el mundo de las sustituciones. El juego de la dialéctica entre la realidad y la ficción.
Esta obra refleja al público lo que se intuye pero jamás se observa.
Cuando un espectador asiste a un espectáculo teatral, consume la obra, con toda su subjetividad, como se presenta ante sus sentidos. Jamás se adentra en “la cocina”. A veces tiene conocimientos de lo que sucede durante los ensayos por entrevistas publicadas de los distintos integrantes del grupo, o por relatos posteriores, pero nunca termina de aprehender lo ocurrido allí.
Y el trabajo de ensayos no solo sucede previamente a un estreno sino que, en algunas ocasiones (mucho más comunes de lo que se cree,) los directores, disconformes con su trabajo, continúan con re-escrituras y modificaciones constantes e inacabables de distintos aspectos de la puesta en escena. También suele ensayarse cuando deben prepararse actores que reemplacen a actores previos. En cualquier caso, lo acontecido en el ensayo, previo o posterior al estreno, no llega a ser vislumbrado por el espectador.
En Estado de ira asistimos a una obra en la que el público es testigo de una de estas situaciones: la trama nos presenta a la señora Miguens (muy bien interpretada por Paola Barrientos), que es una reconocida actriz de la escena nacional, y que ensaya por primera y única vez -dado que hay función al día siguiente-, el personaje de Hedda Gabler, de la pieza homónima de Henrik Ibsen.
Ciro Zorzoli crea una amplia variedad de situaciones cómicas utilizando la sustitución como principal procedimiento, para compartir con el público esos momentos previos a un estreno teatral, al cual la mayoría de las veces se llega con el tiempo que apremia, con cuestiones básicas (como objetos y elementos de vestuario) sin terminar de resolver, con los nervios por el cielo y con un estrés y un maltrato que instaura la violencia en todas las personas que forman parte.
La sustitución se da en varios niveles: por un lado la sustitución de aquellos actores que se tienen que ir, que no están en condiciones, que tienen problemas familiares, etc. Por otro lado la sustitución de objetos, que provoca escenas muy divertidas con la creación de imágenes dislocadas, dado que un objeto cualquiera reemplaza al supuesto “verdadero” que en teoría estará presente al día siguiente para la función.
La sustitución no llega solo hasta ahí, sino que va más allá cuando se sustituye el texto, como sucede con el actor que de tal confusión y de tal estado de nerviosismo, comienza a recitar los parlamentos de Hamlet hasta que es alertado por su partenaire de que están ensayando Hedda Gabler.
Otro procedimiento de la comicidad, es la parodia a aquellas estéticas de actuación que utilizaban la declamación, lo pomposo de los textos, el hincapié en las posturas, los movimientos de brazos, los gestos, el decir de las frases, estéticas ya antiguas a la luz de las corrientes actorales consolidadas a mediados del siglo pasado.
En esta metodología actoral también regía lo que se conoce como “dictadura del director” (aunque ésta la excede ya que se encuentra a lo largo de los siglos en otras formas de actuación), que se caracterizaba por marcar toda la labor del actor, inhabilitando sus posibilidades creativas. Estas marcaciones obsesivas parodiadas, sumadas a escenas muy cercanas de nuestra realidad: actores estatales reclamando el pago de horas extras, empleados que se niegan a realizar trabajos no estipulados en sus contratos, están muy bien logradas y son suficientes para acompañar activamente la función hasta el desenlace final.
El público, que funciona como público dado que está justificada nuestra presencia desde el nivel dramático (remarcado por el diseño de luces), queda integrado a este grupo y a este teatro siendo cómplices silenciosos de todo lo que se dice y todo lo que se ve. Y ese “no actuar” del público, dado que sigue siendo público respetuoso y actúa como tal, genera impotencia que se descarga con la risa estallada de cada situación hilarante. Porque lo cómico constante a lo largo de toda la obra, y dado en gran medida por las distintas sustituciones, ameniza la violencia que llega hasta lo físico: el estado de ira que se aprecia en todos los personajes -que actúan pero que también marcan-, y hacen de actores, reemplazos, directores, asistentes, apuntadores, pese al rol que efectivamente tengan.
La situación del escenario y el clima que allí se genera se observan por transferencia en las periferias de la escena, en los “entretelones”, donde se sostienen las amistades, las idolatrías, las enemistades, los problemas personales. Y observamos al fin, esa tarea tan difícil encomendada y obligada del actor que es la separación entre ficción y realidad. No solo difícil porque la misma persona, con su cuerpo, emociones y mente, habita ambos mundos y, concluida la función, debe pasar de la ficción a la realidad, y “separarse del personaje” como comúnmente se dice; sino porque muchas conductas ocurridas en “la realidad”, como la violencia, también se termina vislumbrando en la ficción. Y como está resaltado en el final de la obra, los actores son seres humanos y, pese a la construcción minuciosa, artificiosa y lograda de un personaje o una escena, se observa en el transitar de los momentos lo que cada uno es y tiene, sea en la realidad o en la ficción.
By Sabrina Gilardenghi
FICHA TECNICA:
Elenco: Paola Barrientos, Pablo Castronovo, Carlos Defeo, Marina Fantini, Vanesa Maja, Cecilia Meijide, Dalila Romero, Diego Rosental, María Inés Sancerni, Gabriel Urbani, Diego Velásquez.
Asistencia artística: Gabriel Baigorria
Iluminación: Eli Sirlin
Escenografía y vestuario: Oria Puppo
Diseño gráfico: estudiopapier
Fotos: Ernesto Donegana
Prensa: Duche & Zárate
Coordinación técnica: Oria Puppo
Coordinación de escenario: Gabriel Baigorria
Coordinación de producción: Romina Chepe
Producción: Complejo Teatral de Buenos Aires
Dramaturgia y Dirección: Ciro Zorzoli
Funciones: Lunes 21 hs. Hasta el 2 de abril de 2012.
Lugar: Teatro Metropolitan (Corrientes 1343)
Entradas: desde $100
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