Tiene carisma, es dueña de una gran cordialidad y se la ve bien plantada. Lleva seis años como dirigente. A los 33 años llegó a la presidencia del Club Atlético Banfield. Quisiera ser juzgada por su calidad como dirigente y no por un asunto de género. Sostiene que la mujer es multifacética y que no viene a suplantar a nadie, sino a ocupar el lugar que le pertenece desde hace tiempo.

Lucía Barbuto llegó el 8 de octubre de 2018 a la presidencia del club que ama. Desde entonces, y cada quince días, participa de reuniones de la Superliga, la primera división de fútbol de la Asociación del Futbol Argentino (AFA). Dice que desde el primer día sus pares la han tratado muy bien y es la más mimada. El presidente de AFA, Claudio “Chiqui” Tapia la ha recibido con los brazos abiertos.

CNN entrevistó a Barbuto en el campo deportivo que Banfield tiene en Luis Guillón, en el sur del Gran Buenos Aires. “Lula”, tal como le dicen sus íntimos, comenta que su nuevo rol en el fútbol le da mas visibilidad a la mujer. “Pero ya veníamos trabajando en secreto o tapadas, pero amamos el fútbol igual que los hombres”, agrega.

Mira fijo a los ojos. Se la nota siempre sin pose. Es natural, tiene una gran capacidad de atención y en el mismo tono responde todos los temas. Enfatiza que la mujer es multifacética. “Puede, a la vez, tener hijos, ser profesional, ocuparse de la casa, también de estudiar y trabajar. Todo ello es muy bueno por ejemplo para un club”, afirma.

En ocasión del Día Internacional de la Mujer, Lucia Barbuto subraya: “En Argentina tenemos una gran problemática con la violencia de género y espero que eso se vaya terminando de a poco, para que nunca tengamos que hablar más de la violencia de género. La mujeres somos compañeras, no enemigas”, remarca.

Puntualiza con alegría que es un orgullo que James Rodríguez (Bayern Munich) y Nicolás Tagliafico (Ajax de Holanda) se hayan formado en “El Taladro”, el nombre del club en la jerga popular. Para Barbuto es también una satisfacción que Hernán Crespo, exfutbolista de gran trayectoria en el fútbol europeo, recientemente vinculado como director técnico, le haya dicho que se había enamorado de Banfield.

Reconoce que su club nunca querrá ser una sociedad anónima, pues el destino de su club es ser una familia con misión comunitaria. Comenta que en el club tienen 20 actividades y admite que el fútbol mantiene a todas ellas.

Desde que es presidenta de Banfield, Barbuto ha recorrido varios clubes y diferentes entes. En todos ellos ha visto a mujeres que tienen el potencial para seguir una carrera de dirigentes.

También dice que no puede establecer cuántas personas la llamaron para felicitarla por el cargo que ostenta.

Barbuto es además licenciada en Obstetricia egresada de la Universidad de Buenos Aires. Dice que es feliz con esta profesión, aunque no puede hacer guardias en hospitales públicos por las responsabilidades que contrajo con Banfield. Quien alguna vez hizo de partera siente una profunda felicidad ejerciendo su profesión